Los Raiders no perdonaron, arrasaron y mantienen sus esperanzas de un cierre perfecto para aspirar a los playoffs de la NFL. El equipo de Las Vegas fue contundente y se impuso por 63-21 a Los Angeles Chargers en el Thursday Night Football de la Semana 15. Es la mayor cantidad de puntos que los Black and Silver meten en un partido, tras superar los que le hicieron a los Denver Broncos el 24 de octubre de 2010 (59-14).
Los californianos se equivocaron a más no poder, con cinco entregas que derivaron en anotaciones para los de Nevada, que defendieron con éxito su localía en el Allegiant Stadium. Aidan O’Connell tuvo su mejor partido como profesional, al completar 20 de 34 pases para 248 yardas y cuatro envíos de anotación; Zamir White corrió 17 veces para 69 yardas y un touchdown, así como ocho recepciones para 101 yardas y una visita a la zona prometida.
El equipo de Los Ángeles resintió la pérdida de su estelar lanzador Justin Herbert toda la temporada; a Easton Stick le tocó pagar los platos rotos y aunque completó 23 de 32 pases para 257 yardas y tuvo tres touchdowns, también le castigaron con un pick six y sufrió dos fumbles que significaron 14 puntos. Brandon Staley firmó un fracaso con esta paliza y cada vez más se calienta su asiento para abandonar su puesto como head coach de los Chargers (5-9).
Y hay festejo del lado de los malosos, que llegan a récord de 6-8 y están 2.5 juegos por detrás de los Kansas City Chiefs (8-5) y a 1.5 de los Denver Broncos (7-6) para buscar ese lugar en los playoffs. Los dirigidos por el coach Antonio Pierce siguen con vida.
Se definió desde el primer cuarto
Tras obligar el despeje en tres y fuera, los Raiders abrieron el marcador en su primera posesión, con un acarreo de una yarda de Zamir White. Easton Stick fue capturado por Malcolm Koonce y soltó el ovoide, que fue recuperado por Tyree Wilson. La ofensiva producto de esa entrega fue exitosa: Aidan O’Connell completó el pase de 30 yardas con Tre Tucker y, tras revisarse la jugada, se reafirmó el touchdown.
Los Chargers intentaron responder por tierra, pero sufrieron un fumble tan pronto iniciaron su tercera ofensiva de la noche. Joshua Kelley corrió cuatro yardas por la izquierda, hasta que Marcus Epps le quitó el balón y Jerry Tillery lo tomó para regresar a su equipo al ataque.
Otra entrega que acabó en anotación: un pase profundo de O’Connell con Jakobi Meyers (22 yardas) terminó con el receptor en la zona prometida y, con los puntos extras anotados por Daniel Carlson, Las Vegas lo ganaba por 21-0 en el primer cuarto.
Todo le salió mal a Los Ángeles. Durante un despeje, Derius Davis perdió el balón cuando DJ Turner se lo arrebató y él mismo controló el ovoide en la yarda 14 de Los Ángeles. Fue cuestión de dos jugadas para que O’Connell conectara un pase corto por la derecha con Michael Mayer (11 yardas) y elevar la ventaja.
El equipo californiano ya estaba destrozado en lo mental y los Raiders no bajaron las revoluciones. El corredor Brandon Bolden llamó la jugada en tercera y tres por avanzar en la yarda 26, con lo que ejecutó la ruta hacia las diagonales. A los Chargers les llegó la hora de jugar las cuatro oportunidades y así les fue, con un primer intento fallido. Antes del descanso, O’Connell encontró a Tucker en un pase de 20 yardas y Las Vegas terminó el segundo cuarto ya con el triunfo en la bolsa (42-0).
Nada cambió
Se reanudaron las acciones en el tercer cuarto y los Black and Silver movieron las cadenas hasta que convirtieron con éxito una jugada en la que Meyers hizo el pase de tres yardas con Davante Adams; los Chargers por fin respondieron y Stick conectó una bomba de 79 yardas con Joshua Palmer. 7-49 favor Las Vegas.
Pero el partido siguió inclinado del lado de los Raiders. Stick llamó a una ofensiva sin reunión y fue capturado de nuevo por Koonce, quien provocó el fumble y John Jenkins lo recuperó para devolverlo 44 yardas hasta la zona prometida. Stick volvió a ser blanco de la defensa de Las Vegas y su pase no fue atrapado por Austin Ekeler, sino que Jack Jones lo interceptó y lo devolvió 16 yardas para el touchdown.
Con el partido asegurado, Las Vegas bajó la intensidad y los Chargers anotaron un par de touchdowns que solo quedaron para la estadística: Stick lanzó corto a la izquierda y Alex Erickson corrió 13 yardas para anotar; el quarterback también encontró a Quentin Johnston en un envío de seis yardas y el marcador quedó 21-63.
MGC
